Los dones recibidos se convierten siempre en una tarea. Esta capacidad que has recibido se convierte en un camino de búsqueda, de equivocaciones y de aprendizajes. Tu propio desarrollo, en distintas áreas y en torno a diversas habilidades, es de las cosas que vale la pena disfrutar. Más aún cuando se trata de una realidad como tu vocación.
This browser does not support the video element.