Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos,
que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espÃÂritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el dÃÂa del Señor está cerca.
Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasÃÂa, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, 2 Tesalonicense 2:1-3
This browser does not support the video element.